Para celebrar el Día Internacional de la Mujer, este 8M quiero resaltar que para mí, el feminismo es, en su esencia más pura, igualdad.
En primer lugar, me gustaría destacar que, si bien en estas líneas me centro en la igualdad de género en conmemoración del 8M, el concepto de igualdad es muchísimo mas amplio, y que es en toda su amplitud que lo entiende el feminismo.
Se trata de derribar los sistemas de opresión impuestos social y culturalmente, especialmente aquellos arraigados en el patriarcado, donde se espera que el hombre domine sobre la mujer.
En este sentido, la igualdad de género es la clave para desmantelar estas estructuras y construir un mundo donde todas las personas tengan las mismas oportunidades y derechos, sin importar su género.
Pero la igualdad de género no es sólo una cuestión de leyes y políticas sino algo mucho más profundo. Es permitir que cada individuo sea quien realmente quiere ser.
Es favorecer la libertad de elección, donde tanto mujeres como hombres pueden decidir cómo quieren vivir, trabajar, amar y expresarse. Es la esencia misma de la diversidad y la inclusión.
¿No te parece que ya es hora de dejar atrás los modelos tradicionales de masculinidad y feminidad que han demostrado ser obsoletos y limitantes? ¿No crees que deberíamos desafiar los prejuicios sexistas y las ideas preconcebidas socialmente heredadas?
Afrontar este desafío, entre otras cosas, implica cuestionar activamente lo que leemos, escuchamos y vemos, y desarrollar un sentido crítico que nos permita enfrentar las generalizaciones y estereotipos de género.
Así, es muy importante que seamos conscientes del contenido que consumimos, ya que éste puede influir en nuestras percepciones y actitudes. Por tanto, evitar el consumo de contenidos sexistas es una buena forma de desafiar y resistir las normas de género injustas que perpetúan la desigualdad.
La empatía y la comunicación son herramientas poderosas en la lucha por la igualdad. Escuchar y ponerse en el lugar del otro nos ayuda a comprender y respetar experiencias y perspectivas diferentes a las nuestras.
Al conectar con los demás, también nos conectamos con nosotros/as mismos/as, alejándonos de las expectativas impuestas por la sociedad y acercándonos a nuestra autenticidad.
Para promover la igualdad no sólo se trata de cambiar las leyes y políticas, sino también de transformar nuestras relaciones personales y dinámicas familiares.
Todos y todas tenemos la responsabilidad de contribuir, por ejemplo, con un hogar donde las tareas se compartan equitativamente y donde se desafíen los roles de género tradicionales.
No obstante, aún queda mucho trabajo por hacer, entre otras razones, porque muchas personas todabía no son conscientes de la importancia de la igualdad o de cómo pueden contribuir a ella en su vida diaria.
Por ello, educar a los demás dando ejemplo con nuestro comportamiento y lenguaje, y creando un clima de equidad, son pasos importantes en este camino hacia la igualdad.
En última instancia, la igualdad es esencial para el bienestar de la sociedad en su conjunto porque la desigualdad no sólo perpetúa el sufrimiento y las injusticias para las personas afectadas, sino que también impide que la sociedad progrese y alcance su máximo potencial.
Por lo tanto, promover la igualdad nos acerca a una sociedad más libre, justa y saludable para todos y todas. No te quedes en el pasado. Únete al activismo por la igualdad.
Si no lo has hecho ya, el Día Internacional de la Mujer es una ocasión excelente para hacerlo y para reflexionar sobre los logros alcanzados en la lucha por los derechos de las mujeres y los desafíos que aún enfrentamos en ese camino hacia la igualdad.
En este día, es importante recordar que el feminismo es mucho más que una etiqueta o un movimiento, es una llamada a la acción para promover la igualdad en todas las áreas de la vida.
Y si para celebrar el 8M también te apetece saber más:
Celebrando el 8M: Promoviendo el Bienestar Laboral para las Mujeres Trabajadoras
25 de noviembre: un compromiso permanente por la eliminación de la violencia contra la mujer
Desmontando Mitos del Amor Romántico: Un Vínculo Peligroso con la Violencia Machista en Adolescentes
