Seguro que eres consciente de que el cambio de estaciones, o del clima en general, te afectan, por ejemplo, podrías padecer astenia primaveral.
Efectivamente, estos cambios no sólo traen consigo transformaciones en el clima y el paisaje, sino también en nuestro estado de ánimo y bienestar emocional.
Si alguna vez te has sentido más cansado/a, irritable o triste durante ciertas épocas del año, podrías haber experimentado lo que se conoce como Trastorno Afectivo Estacional (TAE). Y la astenia primaveral es uno de esos trastornos afectivos estacionales.
El Trastorno Afectivo Estacional es una afectación psicoemocional que sigue un patrón estacional, manifestándose principalmente durante los meses de invierno, aunque también es habitual en primavera u otoño.
Los síntomas pueden incluir fatiga, cambios en el sueño y el apetito, falta de energía, tristeza y dificultad para concentrarse, lo que puede incidir significativamente en el funcionamiento diario y la calidad de vida de quienes lo experimentan.
Se trata de un trastorno transitorio muy común que afecta a más del 50% de la población general, con una prevalencia mayor en mujeres que en hombres. Incluso entre los niños mayores de 9 años, entre el 2% y el 5% pueden experimentar síntomas relacionados con este trastorno.
Los cambios estacionales, como el aumento o disminución de la luz solar y la temperatura, así como los ajustes en los horarios, pueden desencadenar estos síntomas. Además, en primavera, suelen unirse a los síntomas alérgicos, con lo que el malestar puede verse notablemente incrementado.
Ante ello, nuestro cuerpo experimenta cambios hormonales para adaptarse a las nuevas condiciones estacionales que afectan a los ritmos circadianos y los niveles de ciertos neurotransmisores en el cerebro, como la serotonina y la melatonina, implicados en la regulación del estado de ánimo y el sueño.
Aunque los síntomas son transitorios y suelen desaparecer en unos días ¿Cómo podemos manejar mejor el TAE? Pues ya sabes: hábitos de vida saludables.
El ejercicio regular, una alimentación equilibrada y mantener buenas relaciones sociales son fundamentales para mejorar el estado de ánimo y la salud en general
No obstante, si los síntomas persisten o se intensifican, es importante buscar ayuda profesional. Los/as profesionales de la Psicología podemos ofrecerte una variedad de estrategias y técnicas para gestionar el TAE.
Una de las metodologías más efectivas es la Psicología Coaching, que combina técnicas psicológicas con herramientas de coaching para ayudar a comprender y gestionar las emociones de manera más eficaz.
La Psicología Coaching puede ser una potente herramienta para quienes luchan por adaptarse a los cambios estacionales y experimentan síntomas de TAE.
Esta metodología ofrece una comprensión más profunda de uno/a mismo/a y de las propias emociones, lo que permite desarrollar estrategias efectivas para gestionar el trastorno.
El Trastorno Afectivo Estacional es una condición de salud mental que puede afectar significativamente la calidad de vida de quienes lo experimentan.
Pero con el tratamiento adecuado y la implementación de estrategias de manejo efectivas, es posible reducir los síntomas y mejorar el bienestar emocional.
Si experimentas síntomas de TAE, se incrementan o prolongan en el tiempo, no dudes en buscar ayuda profesional para obtener el apoyo necesario.